La publicación “El nacimiento de un símbolo” conmemora más de medio siglo del edificio más emblemático de Medellín y propone una mirada renovada sobre su papel en la transformación del centro.
El edificio Coltejer, ese ícono que ha acompañado durante más de medio siglo la silueta de Medellín, vuelve a ser protagonista. En el marco de la conmemoración de sus 53 años, se. presentó el libro “El nacimiento de un símbolo”, una obra que recoge su historia, su papel en el desarrollo urbano de la ciudad y las múltiples miradas que lo han convertido en un referente de identidad colectiva.
La publicación, escrita por Diego Andrés Ríos Arango y Omar Portela Tangarife, va más allá del relato sobre su diseño y construcción. Se adentra en el significado que el edificio ha tenido para quienes lo habitan y para una ciudad que lo ha asumido como parte inseparable de su paisaje urbano. En palabras de sus autores, se trata de un homenaje a la permanencia de un proyecto que nació como un regalo para Medellín y que hoy sigue inspirando orgullo y pertenencia.
El libro, organizado en cinco capítulos, recorre desde la génesis del edificio —concebido por la Compañía Colombiana de Tejidos S.A. como símbolo del empuje industrial antioqueño— hasta su consolidación como propiedad horizontal que alberga cerca de 30 firmas empresariales. El relato incorpora también la voz de arquitectos, ingenieros, obreros y administradores, que a lo largo de las décadas, han contribuido a mantener vivo este emblema urbano.
Uno de los apartados más llamativos examina la dimensión iconográfica del Coltejer, cuya silueta inconfundible ha sido reinterpretada en el imaginario popular como una aguja de coser o una lanzadera textil. Esa forma, que sobresale en el cielo del centro de Medellín, ha trascendido lo arquitectónico para convertirse en símbolo visual de la ciudad, reproducido en piezas gráficas, postales y campañas turísticas.
En otro de sus capítulos explora la relación del edificio con el centro de Medellín, un territorio que, al igual que el Coltejer, enfrenta desafíos de transformación. Desde su ubicación estratégica, en la esquina de Junín con La Playa, el inmueble se erige como testigo de la evolución urbana y social del corazón de la ciudad, y como ejemplo de cómo las grandes empresas pueden seguir apostando por permanecer en el centro sin abandonar su valor patrimonial.
“El nacimiento de un símbolo” es, ante todo, un ejercicio de memoria colectiva. A través de documentos históricos, testimonios y fotografías, reconstruye la historia del edificio y su impacto en la vida de Medellín. Al hacerlo, invita a reflexionar sobre el sentido del patrimonio, no como una pieza del pasado, sino como un legado vivo que continúa inspirando progreso, identidad y comunidad. Más que un homenaje a una estructura de concreto y acero, el libro es un tributo a una forma de entender la ciudad: la que mira al futuro sin olvidar sus cimientos.
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